Somos un equipo de abogados y abogadas defensores de derechos humanos comprometidos con el litigio estratégico y la justicia social en Colombia. Trabajamos incansablemente por el acceso equitativo a la justicia, la reparación integral, la seguridad, la lucha contra las políticas de drogas y las denuncias por la violencia policial. Nuestra labor se centra en territorios históricamente excluidos, en donde acompañamos procesos de comunidades afrodescendientes que enfrentan el abandono estatal, el conflicto armado y la criminalización.
Somos un grupo interdisciplinario de profesionales del derecho, las relaciones internacionales, el periodismo, la psicología y las ciencias políticas. Compartimos la convicción de que Colombia puede y, debe contar con un sistema de justicia inclusivo y antirracista.
El Colectivo Justicia Racial brotó en 2012, a partir de una conversación en un salón de clases. Allí, Alí Bantú Ashanti, entonces estudiante de Derecho, escuchó a Rafael Palencia, profesor y ex-preso político, afirmar que los derechos humanos son un terreno de disputa y no una lista de buenas intenciones. Dicha intervención encendió una inquietud, ¿cómo responder al racismo y la violencia policial que atravesaban la vida de jóvenes afrocolombianos dentro y fuera de la universidad?
Entre 2013 y 2016, esa inquietud se convirtió en acción. Alí, junto con un grupo de compañeras y compañeros, impulsaron la Cátedra Abierta de Derechos Humanos, un espacio en donde se compartían testimonios, se estudiaba jurisprudencia crítica y se tejían redes de apoyo. En dicho espacio surgió la convicción de que la lucha debía pasar de la reflexión a la práctica: litigar para sentar precedentes y visibilizar cada abuso, pero también capacitar a las comunidades segregadas para reclamar sus derechos.
El quiebre llegó en 2017, con el asesinato de Wilder Alvarado González a manos de la Policía en Bogotá. La indignación colectiva se tradujo en trabajo jurídico: recolección de pruebas, acompañamiento a la familia y presión mediática. Ese mismo impulso llevó al Colectivo a su primera gran victoria en 2018: la revocatoria de una condena injusta de 25 años contra un hombre afrodescendiente. Parte de los honorarios de aquel proceso sirvieron para formalizar nuestra organización y dotarla de los recursos básicos para operar.
Desde entonces, hemos crecido y hoy somos un amplio equipo interdisciplinario de abogadas y abogados, internacionalistas, periodistas, psicólogas y politólogos, entre otros, presente en el territorio nacional. Documentamos violaciones de derechos, adelantamos litigios estratégicos, elaboramos investigaciones que nutren debates legislativos y desarrollamos métodos pedagógicos para que las personas comprendan y exijan sus garantías. No nos mueve la lógica del caso aislado, pues cada proceso busca abrir camino a reformas estructurales y fortalecer a las comunidades que históricamente han quedado al margen de la justicia.
Creemos en una Colombia en donde la dignidad no dependa del color de la piel ni del lugar de origen. Por eso, cada sentencia lograda y cada reforma impulsada es un paso hacia un país que reconoce la igualdad como punto de partida, no como una meta lejana. Esta es la historia que escribimos, no con tinta, sino con la firme decisión de que ninguna vida vuelva a truncarse. Luchamos por quienes han sido descartados y condenados en vida; apostamos por su justicia y defendemos, sin concesiones, la dignidad que les pertenece.
Únete al equipo de mentes apasionadas y corazones comprometidos con la Justicia Racial.
¡Estamos emocionados/as de dar la bienvenida a nuevos/as miembros comprometidos/as con la causa!